Y yo digo que nos quiten lo dormido. Hace no mucho el Daily Telegraph (entre otros, como The New York Times o el diario alemán Der Spiegel) arremetía contra nuestra costumbre de dormir la siesta. ¿Será porque rima con fiesta? Nuestros horarios (comer tarde, cenar tarde, salir hasta tarde) siempre han sido blanco de las críticas por parte de otras culturas. También lo de darnos dos besos y abrazarnos a la primera de cambio. Y yo digo que tanta inquina no es más que envidia.
Aquí nos echamos largas siestas (sobre todo en verano) los fines de semana, tanto si hemos salido de fiesta como si no. Aquí somos cariñosos, besucones y muy de arreglar el mundo en los bares, terrazas y restaurantes, incluso en los modernos gastro bares de aire escandinavo, aunque nuestra costumbre de hablar alto y de gesticular mucho no pegue demasiado con la decoración.
Aquí, señores del Daily Telegraph, tenemos sol casi todo el año y esta es una bendición que nos otorgaron los dioses a nosotros y a ustedes no; recapaciten por qué. Tal vez es que en el Olimpo saben que ustedes no le hubieran sacado demasiado partido a tamaño regalo.
Es el sol probablemente una de las razones de nuestro apego a darle al tacón, al beso y al jamón. Pero es que ni siquiera los fríos del invierno nos impiden salir un viernes a quedar con nuestros amigos y darles dos besos. Mejor dicho, cuatro: dos de ida y dos de vuelta. Y si con uno de ellos pasamos a mayores le daremos algún que otro beso francés. Porque aquí, señores del Daily Telegraph, somos lo bastante inteligentes como para apreciar las buenas costumbres que vienen de fuera, incluso aunque estas sean francesas.
Y como es posible que cenemos más cerca de las diez o de las once que de las ocho, como hacen ustedes, y además nos extendamos con la charla -porque en este país hay ahora mismo muchas cosas que arreglar-, nos darán las tantas, por lo que al día siguiente después de comer (tarde, claro) nos echaremos una bendita siesta que nos cargará las pilas para (tal vez) volver a salir el sábado (hasta tarde, claro).
Quienes tanto arremeten ahora contra nosotros y la siesta es evidente que no saben ni una palabra de mitología griega, ya que la siesta no deja de ser una costumbre de dioses, que solían echar una cabezadita siempre que tenían ocasión. De hecho creo que lo siguen haciendo. Pero he oído que en vez de ponerse un telefilm aburrido para adormilarse después de comer, los dioses prefieren coger el Daily Telegraph.
Aquí nos echamos largas siestas (sobre todo en verano) los fines de semana, tanto si hemos salido de fiesta como si no. Aquí somos cariñosos, besucones y muy de arreglar el mundo en los bares, terrazas y restaurantes, incluso en los modernos gastro bares de aire escandinavo, aunque nuestra costumbre de hablar alto y de gesticular mucho no pegue demasiado con la decoración.
Aquí, señores del Daily Telegraph, tenemos sol casi todo el año y esta es una bendición que nos otorgaron los dioses a nosotros y a ustedes no; recapaciten por qué. Tal vez es que en el Olimpo saben que ustedes no le hubieran sacado demasiado partido a tamaño regalo.
Es el sol probablemente una de las razones de nuestro apego a darle al tacón, al beso y al jamón. Pero es que ni siquiera los fríos del invierno nos impiden salir un viernes a quedar con nuestros amigos y darles dos besos. Mejor dicho, cuatro: dos de ida y dos de vuelta. Y si con uno de ellos pasamos a mayores le daremos algún que otro beso francés. Porque aquí, señores del Daily Telegraph, somos lo bastante inteligentes como para apreciar las buenas costumbres que vienen de fuera, incluso aunque estas sean francesas.
Y como es posible que cenemos más cerca de las diez o de las once que de las ocho, como hacen ustedes, y además nos extendamos con la charla -porque en este país hay ahora mismo muchas cosas que arreglar-, nos darán las tantas, por lo que al día siguiente después de comer (tarde, claro) nos echaremos una bendita siesta que nos cargará las pilas para (tal vez) volver a salir el sábado (hasta tarde, claro).
Quienes tanto arremeten ahora contra nosotros y la siesta es evidente que no saben ni una palabra de mitología griega, ya que la siesta no deja de ser una costumbre de dioses, que solían echar una cabezadita siempre que tenían ocasión. De hecho creo que lo siguen haciendo. Pero he oído que en vez de ponerse un telefilm aburrido para adormilarse después de comer, los dioses prefieren coger el Daily Telegraph.
Fotos: via Mariola Azores Lifestyle board on Pinterest
Bendita siesta!
ResponderEliminarBesos!
Quién pudiera echarse una siestas en esas preciosidades... Debería plantearme el colocar una hamaca así en el jardín que tengo ahora, ¡jaja!
ResponderEliminarMiriana's World Blog
Genial esta entrada! me ha encantado. Y las fotos.... lo que daría por pillar cualquiera de esas camas! :D
ResponderEliminarbesos!
En esos lugares.....quien estuviera ahora mismo! Saludos!
ResponderEliminarPues no tenía ni idea de que esta tradición tan nuestra venía de la mitología. Yo lo que creo es que la siesta es una costumbre que por más que insistan no la vamos a perder. Yo soy fan total de ese momento después de comer y quedarme echando una cabezadita en el sofá. Bss, Mariola:)
ResponderEliminarÓle y óle :-) no podíamos estar más de acuerdo. Nos ha encantado tu entrada y es que no hay nada como una buena siestecita para coger fuerzas y seguir disfrutando de todo lo buenos. Besitos
ResponderEliminarYo la verdad es que no soy nada de siesta, luego duermo fatal pero me parece una costumbre estupenda
ResponderEliminarUn besote
yo no me echo la siesta, pero esos rinconcitos son muy apetecibles
ResponderEliminarYo todos los días hago media hora de siesta y que digan lo que quieran!!! ande yo caliente, riase la gente!!!!m ja ja ja
ResponderEliminarBesos
Ooooh, siesta. A esta hora y después de una comilona es lo que pega. Yo también lei ese artículo y es que me pongo fiera solo de acordarme.
ResponderEliminarY mas en lis sitios espectaculares que nos enseñas.
Besotes
Miss Claire
La verdad es que no soy de siestas. No suelo echarme a dormir, de hecho, no recuerdo la última vez que me dormí la siesta.
ResponderEliminarEso si, en estos 'sets del sueño' que nos pones, te dan ganas de tirarte! jajaja
Y una cosa, siempre quise tener una hamaca en casa!!! Me encantan!!!
XOXO
Lady Wolff
http://www.ladywolff.com/
Soy de siesta de fin de semana, pero con las camas que has enseñado dormiría todos los días.
ResponderEliminarBesos
Solo de ver esos lugares dan ganas de tirarte como si de una piscina se tratase jajajjaj
ResponderEliminarYo la verdad es que no puedo dormir la siesta, ¡¡siempre tengo conservatorio!! Pero aún así, es que no me llama la atención, prefiero tirarme con el Mac jajajjajaj
XOXO
Lady Christina
http://ladychristinaandthecity.blogspot.com.es
OLE, OLE y OLE!
ResponderEliminarDe verdad es que cada vez me lo pones mas dificil flower!, Me ha encantado esta entrada.
Todo muy educadamente dicho... pero que BIEN dicho, como tu sabes, si señora!
Ole la siesta
Ole el sol
Ole los besos
Ole los abrazos
Ole trasnochar
Ole España
Ole, el ole.
Muas
Aran
Por cierto increibles fotos! me iba ahora mismo a cualquiera de ellas. la 8: bufffff!
ResponderEliminarAran