viernes, 22 de junio de 2012

5 Verdades que Ninguna Mujer quiere Oír.


Siempre digo que la verdad está sobrevalorada. Creo que las mentirijillas, las mentiras piadosas, las medias verdades, incluso a veces la mentira pura y dura, son la vaselina que permite que las relaciones sociales fluyan sin grandes dramas.

Yo personalmente, en ciertas ocasiones, prefiero escuchar una mentira a bocajarro que una verdad descarada. Y no soy la única; todos, mujeres y hombres, necesitamos del embuste para sobrevivir, sobre todo cuando lo que está en juego es nuestra autoestima.

Para muestra, cinco botones. ¿A quién le hace gracia oír verdades como estas?


"Ese pantalón te hace el culo gordo"

Él jamás se fija en lo que llevas puesto. Nunca. Pero precisamente hoy, que como has engordado un poco te has puesto tus vaqueros pitillo preferidos -esos que te hacen un culo estupendo- para subirte la moral, él se ha fijado. Vaya si se ha fijado el muy...Ya estás a punto de arrancarle la cabeza de un solo mordisco, a lo zombie, cuando él, abriendo muchísimo los ojos y sin entender nada, te suelta: "¿Pero por qué te enfadas, no me has pedido mil veces que te diga siempre la verdad?" ¡Ajá! Ahí lo tienes, sinceridad masculina en estado puro. Y la verdad, -otra más, si es que a estas alturas puedes soportar tanta sinceridad de golpe- el pobre tiene razón; tú se lo pediste, ¿a qué viene ahora armar tanto jaleo?


"Señora, ¿me puede decir la hora?" 

Sí, bonito, podría, pero es que las señoras del paleolítico no usamos reloj. ¿Señora?, ¡¿Señora?!


Qué horror, qué cara de cansada tienes!" 

Tal vez podrías hacer como siempre y pasarle por alto el comentario a tu amiga bocazas; tal vez en otro momento, hasta te hubieras reído con su manía de soltar lo que piensa sin filtrarlo antes; tal vez. Pero hoy no. Hoy, que te casas dentro de una hora, no le ves la gracia a tu amiga por ninguna parte.


"Ya sé que eres mucho más mayor que yo, pero a mí no me importa"

Esto es lo malo de liarse con un yogurín, que los niños siempre dicen la verdad.


"¿Pero qué te has hecho en el pelo, no has matado a tu peluquero?"

No, voy a empezar por ti, que te tengo más a mano. ¡Por favor! ¿Quién no se ha equivocado alguna vez con un corte de pelo? Un poco de empatía y comprensión es lo que cualquier mujer necesita en un momento tan crítico como este. Y una mentirijilla piadosa para animarla, tampoco le vendría mal.


Piensa en un mundo en el que nadie pudiese mentir. ¿Te imaginas tener que escuchar todos los días lo que de verdad piensan los demás sobre tu físico y sobre ti? Poca gente sobreviviría ante semejante avalancha de bombas anti-amor propio.

Te dejo con una pregunta inocente, ¿cuántas veces no has dicho la verdad o toda la verdad en lo que va de mañana? Tal vez has saludado amablemente a un compañero al que no soportas o le has dicho a una amiga que su nuevo vestido es monísimo y que le queda ideal, cuando lo que realmente piensas es que va hecha un horror; lo más seguro es que también le hayas reído las gracias a tu jefe, aunque ni una sola la tuviese, como siempre... En fin, la lista, al final del día, puede ser infinita.





Fuente Foto: Mariola Azores Via Pinterest






Share:

15 comentarios

  1. Se me ocurren unas cuantas más:
    - se nota que necesitas unas vacaciones...
    - tienes mejor cara, claro como has cogido algún kilo...
    - muy de mi madre: hija cuando tienes que ir a la peluquería? pero si he ido la semana pasada!!
    - otra muy de mi madre: ese vestido te está para no engordar ni un gramo!!

    ResponderEliminar
  2. ¡JAJAJAJA! ¡Las madres sinceras son un filón!

    ResponderEliminar
  3. lation...cuando me dijiste que el vestido amarillo me sentaba muy bien...mentías?
    oh my Gott...

    ResponderEliminar
  4. Bien sabes tú que te lo decía de verdad... ¡si estaba verde de envidia! ;)))

    ResponderEliminar
  5. Jajajajaja! Como sois las macedonieras!

    ResponderEliminar
  6. Siempre navegando en el fino límite entre la verdad y... lo que nunca se debería decir ;)))))

    ResponderEliminar
  7. Jajaja!!!!Tengo q decir q me he reido un monton con este post,pero q yo soy muy sincera con los mios y por lo tanto,tambien lo son conmigo..jaja!Con sus cosas malas y wenas..aunq mas malas.En el trabajo nuestro encargado es un cabron de poca monta,q si engordamos un gramo,nos lo dice y recochinea sin parar,hasta q lo pierdes..pq mas te vale perderlo..jaja!Y para mi amiga siempre tngo muy mala cara,o muy palida,o con ojeras,vamos,como si fuera una enferma perenne.Jaja!!Pero lo q mas miedo me dan son las abuelas..ellas piensan q engordar es algo q nos gusta y nos dicen,!qué guapa que estas!!mira qué muslos! o...¿parece que estas mas reparaica,no?En fin...a mi me joden,pero prefiero oirlas,pq si no,capaz q me pongo como una foca y nadie me lo dice...jaja!

    ResponderEliminar
  8. ¡Es verdad! Las señoras mayores siempre dicen "estás más gorda, mejor más guapa" Y tú piensas que no sabes con qué parte quedarte, si lanzarles un derechazo (mejor no, que tienen mucha habilidad con el bastón ;) o darles un besazo de los que suenan... En fin, insisto, la verdad está sobre valorada.

    ResponderEliminar
  9. Jajaja genial esta entrada, me he reído muchísimo. Casi siempre es mejor escuchar/decir una mentirijilla piadosa o simplemente no decir nada jaja. Un besazo guapa!

    ResponderEliminar
  10. Son cosas que la verdad es que aunque vengan de la persona más querida del mundo, fastidian!!

    ResponderEliminar
  11. jajajja! buenísimas estas frases, comentarios o preguntas( lo que sean) . Yo siempre seré de las que prefiere una verdad a bocajarro por muy dolorosa que sea. Bss, Mariola:)

    ResponderEliminar
  12. Estoy de acuerdo contigo! una mentirijilla piadosa, puede salvarte el día!
    Aran

    ResponderEliminar
  13. Mi madre es de las de "no te han dejado muy bien" cuando vienes de la pelu o "estás más gorda". Le voy a pasar el enlace, jajajaja.

    ResponderEliminar

© La Macedonia de Mariola | All rights reserved.
Blog Layout Created by pipdig